Alrededor de 90 trabajadores no pudieron ingresar entre el turno noche y el turno mañana a la fábrica y se esperan más despidos, alrededor de 300. Varios todavía no recibieron telegrama, pero el escenario es claro. Siderca pretende imponer un acta de suspensiones ya no del 90% ni del 80% -como se esperaba- sino un promedio del 74%, que en los hechos, por comenzar a regirse con dos turnos (mañana-tarde), va a significar de un 70% para muchos trabajadores. Es decir, un recorte del 30% del salario, sumado a la baja salarial 2019 y de años previos.
La UOM Campana, lejos de llamar a organizar a los trabajadores en un plan de lucha, llama a esperar una negociación con la Secretaría de Trabajo. Para sostener la que ellos llaman “paz social”, no convoca a asamblea general de fábrica, no hay paro ni discusión con los afectados o los trabajadores en los sectores. Solo llama a depositar expectativas en el gobierno, el mismo que ya le garantizó a Techint una baja en las retenciones y que fue saludado por Paolo Rocca como “industrialista”. Eso quiere decir: subsidios y aprovisionamiento para Vaca Muerta.
Se trata de una situación similar a aquella del 2015, cuando la UOM negoció una conciliación obligatoria y los despedidos fueron incorporados a un centro de servicios (“pool”), en donde fueron presionados a firmar retiros voluntarios. ¿A quién benefició al final la “conciliación”?
La UOM también afirmó estar “dispuesta” a prorrogar el acta de suspensiones del 2019, como mecanismo de “salvaguardar” los puestos de trabajo, como si el acta originalmente no fuera un recurso de ajuste patronal. La UOM se sorprende incluso de que Tenaris Siderca quiera mayor baja salarial, cuando justamente este tipo de actas son la puerta de entrada para la entrega de mayores condiciones salariales y de trabajo. Hoy los despidos de los contratados son un hecho. Lo que sigue es la reforma del convenio colectivo de trabajo.
Para terminar con este ataque hay que poner en pie un plan de lucha de todos los trabajadores de Siderca, comenzando con un paro y movilización de toda la fábrica. Las reuniones informativas en la seccional tienen que ser reemplazadas por asambleas generales de fábrica. Que los trabajadores discutan y decidan el curso a seguir.
Ningún despido ni suspensión
Por la defensa del convenio y por una recomposición salarial urgente
No al Pacto Social. Que la crisis la paguen los capitalistas
